¡¡¡Hola cocinillas!!!
Seguimos presentándoos recetas de deliciosos arroces. Este arroz con pollo y piña al curry que os traigo hoy me la enseñó mi amiga Rebeca, que me invitó a su casa a comerlo. Yo lo he reinterpretado un poquito a mi estilo. Es una especie de risotto, pues es cremoso, al curry.Es muy sencillo de hacer, se tarda muy poco tiempo y está tan rico que os lo recomiendo sinceramente. Además, apenas gastaréis dinero porque todos los ingredientes son muy baratos.
INGREDIENTES (2 personas):
- Dos o tres puñados de arroz (algo menos de un vaso de agua de arroz como medida).
- Dos o tres filetes de pollo.
- Cuatro rodajas de piña en lata en su jugo (mejor que en almíbar, que es muy dulce).
- Una cebolla.
- Tres dientes de ajo.
- Curri al gusto. (Sed generosos, que tenga sabor).
- Brick pequeño de nata para cocinar (200 ml).
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal al gusto.
ELABORACIÓN:
- Cocéis el arroz en agua con un chorrito de aceite de oliva y sal. Para enriquecer su cocción podéis añadir una pastilla de caldo concentrado o usar el jugo de la lata de piña. (Muy recomendable).
- Picáis la cebolla y el ajo muy finito. Lo sofreís con un poco de aceite de oliva. Cuando haya pochado añadís el pollo previamente troceado en pequeños cachitos y lo cocináis bien. Añadís las rodajas de piña también troceadas y sazonáis con abundante curry. Removed bien y lo retiráis del fuego.
- Mezcláis el arroz con el sofrito y añadís la nata. Debéis remover al fuego hasta que se espese y consuma. Podéis aprovechar ahora para sazonar con algo más de sal o curry, a vuestro gusto.
¡¡Y tachán, tachán!!
Probadlo. Está delicioso. ¡Buen provecho!